UN LUJO AL ALCANCE

Hace unas fechas si refiriéndome a la calidad del producto hablaba de lo que es caro y lo que es barato, en esta ocasión quiero plantear una reflexión sobre los artículos que denominamos de alta gama con precios más elevados que los de las series convencionales.

En un viaje reciente he tenido la oportunidad de poder adquirir uno de los kits de dos coches Pullman de LS Models, concretamente los de Época II que son los que se ajustan a mis modelos europeos. Aunque ya dispongo, afortunadamente, de algún otro modelo de la marca me ha sorprendido la presentación tan cuidada de estos nuevos modelos.

Al abrir y tras separar la primera y segunda capa de material protector aparecen los coches envueltos en un paño de seda y con una tira de plástico que rodea el coche por el centro para poder extraerlo de la caja sin dejar huella. El paño lleva impreso el logotipo de la CIWL. Un detalle de agradecer y que aumenta la sensación de calidad del embalaje. Instrucciones de montaje de las piezas supletorias claras y saquitos de plástico con las piezas que corresponden a cada coche. No son las mismas porque unas están expresamente dedicadas a la cocina.



La calidad de la reproducción exterior e interior es extraordinaria. Fuelles, portaseñales, bogies, sillones en dos colores, lamparillas de mesa, cortinillas en distintas posiciones entre otros detalles ponen aún mas en valor la categoría de la pieza. La rodadura es impecable tanto en vía libre como al pasar por cualquier aparato de vía.  Existe la posibilidad de detallar totalmente el coche para su exposición en vitrina, sacrificando la posibilidad de enganche.  



El juego se compone de dos coches, un salón y otro con servicio de cocina y es posible disponer de un tercer coche que se vende por separado. Las épocas de servicio pueden escogerse entre la II y la III en varias opciones. En mi opinión, unos coches de una excelente calidad por un precio un poco más elevado de un coche convencional, pero que se justifica en cada uno de los detalles del modelo y del embalaje. Un lujo al alcance de la mano de muchos modelistas.

Si valoramos desde un punto de vista estético el modelo y lo comparamos con otros del mercado la diferencia de precio se acorta enormemente. La reflexión final se traduce en una pregunta. ¿No serán más caros esos modelos escasamente detallados, con interiores en un plástico monocolor y con diseños modelísticos propios de los años 70 y 80 del siglo pasado?

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