Como mi maqueta es Renfe época III y, como mucho, principio de IV, me quedé con las ganas de comprar una cisterna doble de las Norte. Es un vagón que me resulta atractivo y encajar este tipo de vagones en mi explotación es relativamente fácil, puedo suponer que estaban en proceso de transformación, con uno o dos tengo bastante para realizar cualquier movimiento en mi estación ya que es fundamentalmente de viajeros. Aún así, tras ver algunas fotos y el vídeo de promoción de la marca que las fabrica, me he decidido a comprar una y dar unos pequeños retoques de acuerdo a la época II.
Se trata fundamentalmente de colocar la pasarela de madera que existía primitivamente y las barandillas alrededor de las bocas de carga de los tanques. Lógicamente se deben mover las escalerillas de acceso. En las fotografías de las cisternas originales se ve perfectamente todo esto.
Con tres tabloncillos de madera de 1mm. de espesor he construido la pasarela, de acuerdo a las tres piezas de madera originales. He utilizado madera de construcción naval y en los bordes exteriores he colocado dos perfiles en L de latón, porque aunque se lije el canto de la madera, al montar la pasarela estéticamente no me daba un perfil exacto de madera cortada. No quedaba mal, pero no me gustaba. He preferido incluir ese perfil que deja una línea recta perfectamente uniforme.
Hay que colocar un par de tacos de la misma madera en la parte inferior de la pasarela para asegurar el apoyo correcto. Con un poco de hilo de latón he fabricado las dos barandillas redondeándolas sobre la misma boca de carga. Un par de agujeros nuevos para recolocar las escalerillas, tapar todos los antiguos que ya no se utilizan y listo.
Hay que colocar un par de tacos de la misma madera en la parte inferior de la pasarela para asegurar el apoyo correcto. Con un poco de hilo de latón he fabricado las dos barandillas redondeándolas sobre la misma boca de carga. Un par de agujeros nuevos para recolocar las escalerillas, tapar todos los antiguos que ya no se utilizan y listo.
Como puede apreciarse también falta, además de pintar los perfiles de la escalerilla del mismo color que las cubas, dar la mano de suciedad, ligerísima, para eliminar el exceso de brillo de las cisternas. Un par de retoques de pintura para otra tarde entretenida.
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