A pesar de que las locomotoras eléctricas no son precisamente las que más me gustan, si he de reconocer que algunos modelos, como las 7200, han sido locomotoras muy deseadas y verlas finalmente en mi maqueta me produce una enorme satisfacción por tanto, aunque ya he hablado de ella de pasada en otra entrada, sería injusto que no dispusiera de una propia.
Yo no sé cuantas veces vería a estas locomotoras en la antigua Estación del Norte de Madrid y en sus depósitos y talleres en compañía de mi abuelo. Sinceramente, pensé que nunca se reproduciría a escala H0 y menos de forma comercial por lo complicado de reproducir el movimiento correcto de sus capots. Un asunto que el gabinete técnico de Electrotren solucionó hábilmente.
Locomotora de expresos que iban hacia el Norte cuando viajar era algo diferente a lo que es ahora. Preciosa locomotora que, junto a sus hermanas 7500, tantas satisfacciones nos han dado a los aficionados. Ah, por favor, no la llamen la cocodrilo española, que no lo es ni le hace falta serlo.
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